
Medicina Narrativa
La medicina narrativa surgió como un movimiento a finales del siglo XX en Inglaterra y
Estados Unidos, con dos publicaciones fundamentales: “Medicina basada en la
narrativa: Diálogo y discurso en la práctica clínica” de Trisha Greenhalgh y Brian
Hurwitz, y “Medicina Narrativa: Honrar las historias de enfermedad” de Rita Charon (1).
Sus objetivos eran complementar la naturaleza narrativa de la experiencia de la
enfermedad y su subjetividad con la medicina basada en la evidencia (2).
Desde entonces, la práctica de medicina narrativa se ha ido diversificando,
coincidiendo todas ellas en que la narrativa es fundamental para la medicina, siendo
necesaria la adquisición de habilidades que permitan interactuar en las relaciones
entre los pacientes y los profesionales sanitarios (1).
Según Rita Charon, la medicina narrativa fortalece la atención sanitaria con la
adquisición de habilidades para recibir hábilmente las historias de las personas -al
reconocer, absorber, interpretar y ser movido a la acción por los relatos de los demás.
Desafiando así una visión reduccionista y fragmentada de la medicina que tiene poco
en cuenta los aspectos singulares de la vida del paciente (3). Se basa en la literatura y
las humanidades médicas para adquirir unas habilidades narrativas a través del
análisis de una obra artística mediante la lectura atenta, la escritura reflexiva y
creativa, y la respuesta a la escritura de los demás. Esto genera una conciencia y un
lenguaje que se traducirán en una escucha atenta en una conversación médico-
paciente y se verán reflejadas en las propias vidas de los profesionales sanitarios (1).
Por otro lado, existe la práctica narrativa, formación cuyo objetivo es aplicar las
habilidades narrativas en conversaciones clínicas mediante encuentros que ocurren
sobre situaciones de la vida real (1).
Los diferentes abordajes de medicina narrativa tienen en común la adquisición de
habilidades narrativas que permiten a los profesionales sanitarios en los encuentros
con los pacientes ser facilitadores de sus historias, colaborando en la re-significación,
al posibilitar el encuentro de un sentido a la experiencia de enfermedad que están
viviendo.
Referencias
1- Launer, J. and Wohlmann, A. (2023) ‘Narrative medicine, narrative practice and the
creation of meaning’, Lancet, 401(10371), pp. 98-99. doi:
https://doi.org/10.1016/s0140-6736(23)00017-x
2- Greenhalgh T. Narrative-based medicine in an evidence world, BMJ 1999;318: 323-
325
3- Charon, R. (2006) Narrative medicine: honoring the stories of illness. Oxford: Oxford
University Press.
Bibliografía recomendada:
Charon, R. (2006) Narrative medicine: honoring the stories of illness. Oxford:
Oxford University Press.
Launer, J. (2018) Narrative-based practice in health and social care:
conversations inviting change. Abingdon: Routledge.
Jofré, P. (2021) Medicina narrativa. Humanismo para la salud.Universidad de
Valparaíso.
Páginas web en español:
Encuentros de medicina narrativa de la Universidad de Columbia, para poner
en práctica las habilidades narrativas que describe la Dra. Rita Charon:
https://narrativemedicine.blog/blog/virtual-live-sessions/encuentros-de-medicina-
Laboratorio de Medicina Narrativa de la Universidad de Valparaíso donde
encontrarán guías y artículos sobre la medicina narrativa y sus aplicaciones
https://medicinanarrativa.uv.cl/
Páginas web en inglés:
– Sociedad Europea de Medicina Narrativa (UENAMES):
https://www.medicinanarrativa.eu/narrative-medicine-istud
– Conversaciones que invitan al cambio: